¿Dónde estaba ZP el 13 de marzo?
¿Dónde estaba ZP el 13 de marzo?
Mariano Rajoy ha puesto encima de la mesa una de las claves de la Comisión de Investigación del 11 de marzo. Rajoy ha nombrado a la "bicha". El Partido Popular piensa que hay razones de peso para que Zapatero comparezca en esa Comisión para aportar datos "de evidente interés y trascendencia" sobre lo ocurrido la tarde del sábado 13 de marzo. Una cuestión, que hasta ahora, de forma incomprensible, los populares habían mantenido aparcado y que desde luego no es un fleco anecdótico.
¿Donde estaba Zapatero el 13 de marzo? ¿Qué hacía el secretario general del PSOE, mientras Pérez Rubalcaba rompía el día de reflexión? ¿Desde qué despacho de la calle Ferraz, Zapatero seguía por televisión la intervención del ahora portavoz parlamentario socialista calificando de mentiroso al Ejecutivo Aznar? ¿Cuándo y cómo pactaron Zapatero y Rubalcaba esas palabras, sin precedentes, en la democracia española? ¿En qué momento Zapatero dió luz verde para que un miembro de su partido hablará en público en el día de reflexión? Son muchas preguntas, que por el momento no tienen respuesta y que tampoco habían sido planteados por el PP en la Comisión de Investigación.
Por todo ello, que Mariano Rajoy haya planteado la posibilidad de que Zapatero acuda a declarar es una buena noticia para todos. Hasta ahora el presidente del Gobierno había estado parapetado detrás de sus fieles. Blanco, Rubalcaba o Fernández de la Vega habían servido de parachoques en una triste noche para la democracia española. Zapatero estaba allí, y eso no se puede enterrar. Es muy bueno que José María Aznar acuda a la Comisión para dejar su testimonio. Pero lo que parece obligatorio es que Zapatero no se quite del medio. El actual presidente del Gobierno, no es ajeno a todo lo que pasó. Rubalcaba no actuó por libre, y el entonces candidato al menos estaría informado de como se rompía el día de reflexión. En resumen, Zapatero tiene mucho que decir y explicar. ¿Donde estaba el 13 de marzo?
Mariano Rajoy ha puesto encima de la mesa una de las claves de la Comisión de Investigación del 11 de marzo. Rajoy ha nombrado a la "bicha". El Partido Popular piensa que hay razones de peso para que Zapatero comparezca en esa Comisión para aportar datos "de evidente interés y trascendencia" sobre lo ocurrido la tarde del sábado 13 de marzo. Una cuestión, que hasta ahora, de forma incomprensible, los populares habían mantenido aparcado y que desde luego no es un fleco anecdótico.
¿Donde estaba Zapatero el 13 de marzo? ¿Qué hacía el secretario general del PSOE, mientras Pérez Rubalcaba rompía el día de reflexión? ¿Desde qué despacho de la calle Ferraz, Zapatero seguía por televisión la intervención del ahora portavoz parlamentario socialista calificando de mentiroso al Ejecutivo Aznar? ¿Cuándo y cómo pactaron Zapatero y Rubalcaba esas palabras, sin precedentes, en la democracia española? ¿En qué momento Zapatero dió luz verde para que un miembro de su partido hablará en público en el día de reflexión? Son muchas preguntas, que por el momento no tienen respuesta y que tampoco habían sido planteados por el PP en la Comisión de Investigación.
Por todo ello, que Mariano Rajoy haya planteado la posibilidad de que Zapatero acuda a declarar es una buena noticia para todos. Hasta ahora el presidente del Gobierno había estado parapetado detrás de sus fieles. Blanco, Rubalcaba o Fernández de la Vega habían servido de parachoques en una triste noche para la democracia española. Zapatero estaba allí, y eso no se puede enterrar. Es muy bueno que José María Aznar acuda a la Comisión para dejar su testimonio. Pero lo que parece obligatorio es que Zapatero no se quite del medio. El actual presidente del Gobierno, no es ajeno a todo lo que pasó. Rubalcaba no actuó por libre, y el entonces candidato al menos estaría informado de como se rompía el día de reflexión. En resumen, Zapatero tiene mucho que decir y explicar. ¿Donde estaba el 13 de marzo?
12 comentarios
Televidente -
Pero el sueño puede ahora convertirse en insomnio, con un Aznar seguro de sí mismo, políglota, profesor estrella invitado por la prestigiosa universidad americana de Georgetown como "distinguido especialista en el ámbito del liderazgo internacional", jugando además en su terreno la vida parlamentaria, con más datos que sus acusadores, y encima con cosas que decir a todos los presentes, esta vez en español, para que se le entienda todo. Y Aznar, por si fuera poco, apoyado por su partido del que será presidente de honor entonces, con Mariano Rajoy no sólo a su lado en todo momento en la sala Cánovas del Congreso de los Diputados, sino incluso dispuesto a comparecer en la Comisión presidida por el canario Paulino Rivero.
Televidente -
No es, sin embargo, un callejón sin salida. Si el PSOE está seguro de sus cartas, pero seguro de verdad, lo tiene fácil: dejar que Aznar haga el ridículo ante todo el país con las cámaras de TVE apuntándole en directo a su cara, y además hacer que declare después con el mismo auditorio José Luis Rodríguez Zapatero. La cosa es que no terminan de estar seguros. Me da que hay miedo, para qué andarnos con rodeos. De ahí que tanto el secretario de Estado de Comunicación, Miguel Barroso, como el director de Informativos de TVE, Fran Llorente, propongan que bajo ningún concepto la televisión pública retransmita la intervención del "bigotes regañón".
Gafotas -
Zapatero no quiere comparecer, pero también está obligado a hacerlo como presidente del gobierno de España que surgió de aquella masacre, para explicar su comportamiento durante aquellos tres días y para aportar todos los datos que posee. Los ciudadanos españoles tenemos derecho a conocer toda la verdad sobre la masacre del 11-M y sobre el "antes" y el "después" de la mísma.
Por eso exigimos a TVE que retransmita en directo las comparecencias para ver y oir a los declarantes y poder sacar nuestras conclusiones sin que nadie nos las matice, nos la resuma o nos las traduzca. No es un ruego a TVE, es una firme exigencia.
Javier conrado -
Manolito -
Patinete -
Sabemos que PRISA tenía un estudio detallado de lo que hacer después de los atentados para engañar a la opinión pública española sobre su autoría... y el partido socialista da, puntualmente, cada mes, una nueva prebenda a Prisa... la última relacionada con uno de sus mayores negocios: los libros de texto.
Sabemos que detrás de cualquier conspiración tiene que haber un plan detallado...y el partido socialista demuestra cada día que no tiene un plan para gobernar España...¿Qué pretendía entonces cuando colaboró con los que ejecutaron la masacre del 11M?...
¿Puede esto considerarse un misterio?.
No. Lo que pretenden siempre los socialistas con el poder es lo mismo. Llenarse los bolsillos a costa de los contribuyentes. Cuanto más rápido...mejor.
Sabemos muchos más detalles que poco a poco han ido quedando recopilados en este diario y en otras muchas bitácoras...y lo que sabemos demuestra que la verdad oficial, la verdad socialista, ES MENTIRA.
Patinete -
Sabemos que la trama que está detrás de los atentados del 11M es muy compleja...difícil de encontrar...pero el partido socialista se empeña cada día en decirnos que es algo bien sencillo...unos chorizos marroquíes con un par de traficantes asturianos ...
Sabemos que los nacionalistas catalanes sabían que el atentado del 11M se iba a producir, sabemos que la misma mañana de los atentados Carod hablaba con Otegui de las estrategias a seguir en un tono de confianza que hacían que Otegui confesase la autoría de ETA...y el partido socialista continua formando gobierno con ellos en Cataluña y sigue al pié de la letra sus exigencias en toda España.
Sabemos que la mayor parte de los pringaos involucrados en los atentados eran marroquíes...y el partido socialista besa el suelo que pisan....
Sabemos que el reyezuelo de aquellas tierras amenazó ya en el año 2000 a nuestro ministro de exteriores con la posibilidad de que en España se produjesen atentados terroristas si no cumplíamos determinadas condiciones con Marruecos...y el partido socialista negocia, cede y abdica de nuestros intereses cada vez que el moro lo solicita...
Leon -
Sin embargo, no hay que entender la petición formulada por los populares como un simple acto de represalia ante el incalificable comportamiento de los socialistas y de sus aliados en la Cámara a la hora de seleccionar a los intervinientes. Y no debe entenderse así porque la comparecencia de Rodríguez Zapatero es, desde un punto de vista meramente objetivo, de absoluta conveniencia a raíz de nuevas revelaciones, como las del ministro de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, quien ha reconocido que pasó información sobre la autoría del atentado al PSOE y al presidente del CNI, Jorge Dezcallar, sin que éste, al parecer, la transmitiera al Gobierno.
El actual presidente es, además, conocedor de primera mano de lo que ocurrió en el seno de su partido tras la matanza de Atocha y podría explicar algunas de las incógnitas aún pendientes sobre la campaña de acoso que sufrió el Partido Popular y que culminó con las manifestaciones y los ataques a sus sedes en plena jornada de reflexión.
Comportamientos que hay que aclarar porque el 11-M, tal y como pretendían los terroristas, influyó decisivamente en la jornada electoral del 14 de marzo, con el inesperado vuelco en las urnas.
Pablo -
Pero ya apuntan datos de que medio Gobierno (PSOE-PRISA), no quiere que ZP se exponga a algunas preguntas incómodas y a dar algunas respuestas que después lo retraten como mentiroso.
Mirón -
Paco -
Cuando Alfredo Pérez Rubalcaba ha perdido los papeles, como lo ha hecho este miércoles, es que está comenzando a inquietarse ante lo que les puede venir encima. Esa negativa rotunda de los socialistas para que periodistas y confidentes acudan a la comisión es una señal definitiva para saber dónde está la raíz de la historia. Y la negativa para facilitar la lista de los mensajes y llamadas de móviles de aquel día lo confirma definitivamente. En el PSOE comienzan a sentirse acorralados. El PP tiene que acelerar ahora sin complejos. Zapatero deberá salir a la palestra. No valen los escondites, auque estén aliñados con sonrisas y talante.
Paco -
Es cierto que hay otra clave de una gran importancia como es investigar la autoría intelectual de los atentados del 11-M. Pero también existe una perspectiva política que no se debería ocultar. Zapatero no es ajeno a lo que ocurrió el 13 de marzo. Los socialistas lo saben y han elaborado una complicada tela de araña para tener parapetado al actual presidente del Gobierno. ZP estaba en el cogollo de las decisiones sobre lo que pasó en la jornada de reflexión y, por lo tanto, tiene la obligación de declarar ante la Comisión de Investigación. Vivió el 13 de marzo en primera fila. Es un testimonio imprescindible para aclarar la verdad.