La culpa es de Aznar.

La culpa es de Aznar.

Se nos anuncian días difíciles. Sufriremos un empobrecimiento; no será tan fácil resolver el problema de la vivienda; las infraestructuras se ralentizarán; la alta velocidad se reestudiará; las desalaciones, alternativa al PHN, llegarán cuando lleguen; la violencia en el País Vasco es una diversión y para qué vamos a poner serios a esos chicos. Éste es el país de la sonrisa. Y de todo lo malo tiene la culpa Aznar. Los socialistas conocen la fuente de los males. Solbes dice que tenemos un déficit pavoroso por culpa de Aznar, Estrella que la crisis de Venezuela se debe a errores de Aznar, López Garrido que el desorbitado precio del petróleo lo produjo Aznar, Rumí que las pateras crecen por imprevisiones de Aznar, y hasta han descubierto que Aznar dejó una España empobrecida cosa que en su ceguera no habían detectado los ciudadanos. Un día en lugar de culpar a los autores del mayor atentado en Europa, Rubalcaba culpó a Aznar. Además, a Aznar no le dejan comparecer ante la Comisión del 11-M «porque mentiría como mintió Acebes», o sea, que el ex ministro se pasó diez horas mintiendo. Si de verdad Aznar hubiese sido el mentor de todo lo que le achacan millones de españoles hubiesen sido tontos en 1996, 2000 y 2004. Porque su partido tuvo el 14-M nueve millones y medio de votos. Y conforma la oposición más sólida de la democracia.

21 comentarios

[Rosario J. - 23 de noviembre de 2004 - 19:47]

Una buena iniciativa de un Aznar reforzado.

También asistieron Ángel Acebes, Eduardo Zaplana, Esperanza Aguirre y José María Michavila. Aznar recordó que "hoy la amenaza sobre nuestras democracia viene del terrorismo", con especial referencia al integrista islámico. "Estoy convencido de que la libertad triunfará, frente a los desafíos de hoy, de igual manera que triunfó ante las amenazas del pasado". Aznar, quien fue recibido con gritos de "presidente" por los jóvenes, se ha fortalecido políticamente tras la victoria de su amigo George Bush. Su discurso de principios democráticos y firmeza en la lucha contra el terrorismo no sólo no ha quedado fuera de juego, sino que ha recibido un respaldo de legitimidad. Aznar puede estar llamado a ocupar puestos relevantes en el concierto internacional.

[Rosario J. - 23 de noviembre de 2004 - 19:45]

El aniversario de la caída del muro de Berlín ha pasado casi inadvertido. A la izquierda no parece interesarle recordar el evento que pone en cuestión su pulsión estatista y la tradición totalitaria de buena parte de ella. La FAES de José María Aznar se ha apuntado un buen tanto organizando un ciclo de alto nivel sobre la revolución de la libertad. La apertura del curso, en el salón de actos del CEU, contó con tanta asistencia juvenil que hubo de limitarse a los delegados de curso.

[Juezes - 18 de octubre de 2004 - 11:28]

Somos muchos los españoles, entre los que también hay cada vez más honrados socialistas, que vemos con toda evidencia el odio y rencor que exhala contra Aznar el Gobierno de ZP. No soportan el contraste entre los catorce años de corrupción sociata-felipista, que nos dejó sumidos en una ruina económica, política, moral y social, con los ocho de progreso, honradez y prosperidad de Aznar. Su reacción es la propia de mediocres, incapaces e irresponsables cuyo objetivo es arribar a la poltrona del poder con cualquier clase de votos, no para conseguir el bien común de España y de los españoles, sino para medrar personal y familiarmente. Este artículo del Sr. Van-Halen es un fiel retrato del PSOE y la pandilla que lo integra. Es cierto que los voceros del PSOE no saben otra cosa que insultar, calumniar, difamar a los políticos del PP y, en particular, a Aznar. Y es que una de las razones para tratar de desprestigiar a Aznar es que son los mismos gobernantes del PSOE los más convencidos de su propia incapacidad para conseguir de positivo para España ni la cuarta parte de lo que consiguió Aznar. Por esta razón tienen que tratar de desacreditarlo con insultos, calumnias y hasta chistes barriobajeros para que en un futuro próximo no se note tanto el ridículo que han hecho y el pestilente lodazal de corrupción en el que nos volverán a dejar asfixiados.

[Eleuterio - 14 de octubre de 2004 - 11:04]

Es tremendamente gratificante la noticia de las últimas detenciones de los integrantes de la cúpula de ETA y esperemos que sea la última que se desmantela, para que los pocos terroristas que aún andan sueltos se vean incapaces de reorganizarse de nuevo para tener una estructura con la que puedan organizar más atentados y finalmente den todos con sus huesos en la cárcel. Dichas acciones policiales son el resultado final de una política antiterrorista ejemplar, diseñada, mantenida y aplicada gracias a la «tozudez» del Gobierno anterior del PP y de su máximo responsable, el señor Aznar. En la foto y en la comparecencia del actual ministro del Interior, faltó la del director de la Guardia Civil, que algo tuvo que ver, digo yo. Esperemos que el señor Alonso no se autoimponga ninguna medalla.
Gracias, señor Aznar.

[Cecilio - 10 de octubre de 2004 - 20:12]

Soy de derechas. No soy de centro. No lo seré jamás. Ser de centro es representar a la Nada. Me duele y me sofoca el discurso propagándístico de Rajoy, sobre todo cuando vende a los cuatro vientos que el PP es de centro. Ya, y quienes nos movemos en la democracia, y hemos trabajado para afianzanzarla, sin renegar por ello de nuestra herencia cultural, todos nosotros tenemos que aplaudir como corderitos. No, gracias.

[Cecilio - 10 de octubre de 2004 - 20:12]

No soy de centro. ¿Para qué? Casi seguro que nunca estaré en un lista electoral dispuesto a soltar mentiras, con el objetivo de ganar unas elecciones. No soy de centro. Quiero seguir siendo un hombre de derechas. Tal vez porque, intelectualmente me siento más cómodo en ese lado de la balanza democrática.

Sin embargo, desde que Zapatero subió al poder político y mediático -que no es poca cosa-, ser de derechas en este país vuelve a estar muy mal visto, incluso en las filas del Partido Popular. Hay que proclamar -parece que esa es la consigna-, que uno -un servidor-, siempre ha sido y será un hombre español de centro. Decir, por el contrario, que se abraza con cariño el postulado de la derecha democrática europea y española, es como hacer más daño al PP del que hoy día le hace Polanco y sus correligionarios. Pues no, y lo siento.

Votaré al PP, siempre y cuando nadie me impida proclamar que ser de derechas es tan genuinamente democrático como ser de izquierdas. Aunque yo tego mis dudas. Por ejemplo: ¿Es baladí que todavía muchos socialistas sigan diciendo que el régimen castrista es útil para Cuba? ¿Es legítimo que el PSOE conforme una estructura de poder a la sombra de partidos políticos secesionistas y capaces de todo para hundir la concordia de 1978? La derecha democrática que yo represento -más intelectual que económica- tiene que mostrarse viva, sin verguenza ante la mirada del socialista; tiene que enseñar sus verdades y sus muchas cualidades.

[Laredo - 06 de octubre de 2004 - 18:34]

Lo malo de esta tramoya o estratagema es que el cuerpo insepulto de Aznar no se deja incinerar. Sigue marcando paquete político.

Lo han comparado con Bin Laden, le han cargados los muertos de Atocha, lo pintan como a un pigmeo sanguinario, que intenta eclipsar a Rajoy. Los que más le muerden los tobillos son aquellos a los que más favoreció dándoles programas de televisión y enchufes en fontanería. No sé quién dijo que el que venga beneficios es implacable.

José Blanco dijo que no sabe por qué la derecha se queja de que la linchen teniendo en cuenta que en materia de revanchismo la derecha española es una referencia mundial. Tenía razón. A Aznar lo están liquidando también los suyos.

[Laredo - 06 de octubre de 2004 - 18:32]

La necesidad absoluta de defender a toda costa nuestra frágil e imperfecta democracia. Pues a mí me parece que las cosas son aún más graves: no es que el PP no supiera convencer, es que no estaba convencido.

En todo caso, amplios sectores de ese partido se asustaron ante las multitudinarias manifestaciones callejeras, ante la inaudita campaña de prensa, contra el «trío de las Azores». Bush, Blair, Aznar, y para decirlo como en el Café de Chinitas, se rajaron. En esas condiciones, no iban a convencer a nadie, iban derechos al fracaso.

Uno de los que lideraron, y eso desde hace más de un año, el «acoso a Aznar», fue Felipe González, pero este señor tiene un estatuto particular: alguien le propuso un pacto secreto: enterramos los «papeles del Cesid», no irás a la cárcel por lo del GAL, Filesa y lo demás, pero a cambio, no volverás a ser presidente del Gobierno de España.

Había aceptado, a este señor sólo le quedaba la posibilidad de seguir haciendo negocios sucios, pero en América Latina, Argentina y Cuba, concretamente, y de situarse como referente moral de izquierdas, insultando sistemáticamente al presidente del Gobierno que lo hizo todo infinitamente mejor que él. Aznar, claro.

[Siempre yo - 06 de octubre de 2004 - 18:28]

La necesidad absoluta de defender a toda costa nuestra frágil e imperfecta democracia. Pues a mí me parece que las cosas son aún más graves: no es que el PP no supiera convencer, es que no estaba convencido.

En todo caso, amplios sectores de ese partido se asustaron ante las multitudinarias manifestaciones callejeras, ante la inaudita campaña de prensa, contra el «trío de las Azores». Bush, Blair, Aznar, y para decirlo como en el Café de Chinitas, se rajaron. En esas condiciones, no iban a convencer a nadie, iban derechos al fracaso.

Uno de los que lideraron, y eso desde hace más de un año, el «acoso a Aznar», fue Felipe González, pero este señor tiene un estatuto particular: alguien le propuso un pacto secreto: enterramos los «papeles del Cesid», no irás a la cárcel por lo del GAL, Filesa y lo demás, pero a cambio, no volverás a ser presidente del Gobierno de España.

Había aceptado, a este señor sólo le quedaba la posibilidad de seguir haciendo negocios sucios, pero en América Latina, Argentina y Cuba, concretamente, y de situarse como referente moral de izquierdas, insultando sistemáticamente al presidente del Gobierno que lo hizo todo infinitamente mejor que él. Aznar, claro.

[Siempre yo - 06 de octubre de 2004 - 18:27]

Pero todo el mundo sabe y no vale la pena repetirlo eternamente, que quien ganó las elecciones fue el miedo. Hoy puede decirse que los casi doscientos muertos en los tremendos atentados de los trenes de cercanías actuaron de forma singular: los atentados se deben a que Aznar nos ha metido en el lío de Iraq, por lo tanto, le echamos a Aznar, y ya no tendremos más atentados.

Es una visión simplista, errónea y cobarde de la situación, pero que ha funcionado a las mil maravillas, puesto que Rodríguez Zapatero ha sido elegido presidente del Gobierno, e inmediatamente ha aplicado la política dictada por ese miedo, retirando nuestras tropas de Iraq, y buscando por todas partes y por todos los medios la conciliación, la negociación, en una palabra: la claudicación ante las amenazas terroristas. Esperemos que no ocurra exactamente lo mismo con ETA, pero por ahora se justifican las mayores dudas al respecto.

Muchos, analizando los hechos y los resultados electorales, convencidos de que el Gobierno Aznar lo había hecho bien en política económica, con una disminución notable del paro, y un asimismo notable crecimiento, convencidos incluso que habían tenido razón en política internacional, creyeron encontrar el fallo en la mala política de explicación, de propaganda, o como se dice ahora, de comunicación: ni Aznar, ni el Gobierno, ni el PP, supieron convencer a los españoles de la necesaria solidaridad internacional en la guerra contra el terrorismo, que se trate de Afganistán, de Iraq, y de donde sea, hasta San Sebastián.

[Siempre yo - 06 de octubre de 2004 - 18:26]

Lo curioso del caso es que Aznar no está, quiero decir, que antes de los atentados y de las elecciones de marzo. Aznar había anunciado que se retiraba, que ocho años de presidente del Gobierno, y más del PP, le parecían suficientes, que no había que aferrarse al poder, y cumplió con su palabra. Es un ejemplo, dicho sea de paso.

Por lo tanto, el único motivo que veo en este sistemático linchamiento de Aznar por parte del «imperio Polanco», y de sus intelectuales de turno, gloriosamente movilizados, ayer contra el «acoso a ‘‘El País’’», y hoy contra Aznar, no es que ponga en peligro inmediato a Zapatero, no puede y no quiere, el miedo y el consiguiente odio que le tienen, es el temor a que vuelva. Y, ¿por qué tanto odio? Porque Aznar lo hizo muy bien, y es precisamente porque lo hizo muy bien que le odian.

Bueno, en política, nada, nunca, resulta muy bien, digamos que lo hizo lo mejor posible. Se me dirá, ¿por qué entonces perdió las elecciones? Primero no las perdió él, ya que no era candidato, pero sí el PP y Mariano Rajoy, y sigo convencido de que Rajoy no tiene el carisma, un carisma muy discutido, pero carisma, de Aznar, o si se prefiere el «peso» de Aznar.

[Siempre yo - 06 de octubre de 2004 - 18:25]

Pero claro, incluso a bobas como Susan Sontag, y a cientos más, si se les pide la firma para protestar contra la censura, y las amenazas contra un diario como «El País», todos firman. Yo, si no hubiera estado al tanto, también hubiera firmado.

Pero bueno, eso pasó y fue un triunfo absoluto para el «imperio Polanco», que hasta logró procesar al juez Gómez de Liaño. Y ahora vuelven a emplear los mismos métodos, inspirados de los del Kominform, y de la propaganda nazi, que pueden resumirse así: si una mentira se repite todos los días en medios tan potentes, algo queda en la mente de la gente, y si no todos se adhieren adhiere a la mentira, el clásico «algo debe de haber» del conformismo y de la cobardía se difunde.

Todos los días, desde hace semanas, «El País» emplea los mismos métodos que utilizó para defenderse victoriosamente para machacar a Aznar. Todos los días nos afirman que el culpable de todo, de los atentados de Atocha, de la crisis de Europa, de la guerra de Iraq, de la violencia doméstica, y hasta del clima, es Aznar.

[Siempre yo - 06 de octubre de 2004 - 18:24]

Todo el mundo recuerda, bueno algunos, la gigantesca estafa mediática y a fin de cuentas política, del «acoso» a «El País», que convenció al mundo entero de que los herederos de Franco, o sea el Gobierno Aznar, quería suprimir ese diario, y todos firmaron el llamamiento a favor de la «libertad de expresión», que llenó durante días y días las páginas de ese periódico.

Sí, todos firmaron, hasta Guillermo Cabrera Infante, quien sin embargo sabía por dónde iban los tiros, pero cedió al chantaje; en cambio, Mario Vargas Llosa, no.

Mario se negó a firmar esa mentira, porque en realidad nadie pensó un segundo en suprimir «El País», ni se trataba de eso; se trataba, sencillamente, de una cuestión de pelas, de una guerra sucia por los derechos de fútbol en televisión.

[Albaro - 05 de octubre de 2004 - 19:40]

Cogimos el vuelo 11-S hacia Nueva York. El comandante parecía experto, pero antipático. Hicimos escala en las Azores, dejamos en tierra al comandante y entregamos el mando a un joven sonriente y con talante: nos dijo que el vuelo era el 11-M, y tomamos rumbo a París. Sin embargo dudo de su experiencia: por mi ventanilla sólo veo tierra marroquí y caemos en picado. SOS.

[Luisa - 04 de octubre de 2004 - 10:15]

Le ruego me permita a través de estas líneas agradecer al Sr. Aznar, que ha dejado de ser presidente del PP, todo cuanto a lo largo de estos ocho años ha puesto al alcance de nuestras manos. El orgullo de ser ciudadanos de esta gran nación España, y el permitirnos confiar que en política se puede uno marchar como lo ha hecho él: con las cuentas claras, las manos limpias y la frente alta, y no como lo hicieron otros: las arcas vacías, el crimen de estado y la tragedia de haber matado en el corazón de un país la fe en sus gobernantes. Muy agradecida.

[Luisa - 22 de septiembre de 2004 - 20:07]

Apenas veinticuatro horas después de su formación y celebración el "trío de Madrid" (Chirac, Schröder y ZP) ha tenido que encajar su primera derrota política. En la reunión del Consejo del Atlántico Norte celebrada este miércoles en Bruselas, los representantes de todos los países miembros, salvo Francia y España han decidido que la Alianza establecerá en Irak un centro de formación para las futuras fuerzas armadas del país. La decisión se tomó por consenso sin que franceses, alemanes y españoles pudieran evitarlo.

[amedio - 07 de septiembre de 2004 - 18:51]

Hay mucho ciudadano con enfermedades más o menos terminales dispuestos a vivir con su enfermedad, llenos de gozo y alegria. Que les hagan una película a ellos que son los generosos, los sacrificados y no a los egoístas que se quitan la vida. Si los del PSOE fueron a apoyar el contenido de la cinta, da miedo hasta que punto están dispuestos a respetar la vida. ¿Por qué no dan los beneficios de la película para todos esos centros que ayudan a los enfermos terminales a vivir con alegría y dignidad la vida que Dios les ha dado?

[José Luis - 07 de septiembre de 2004 - 18:51]

Zapatero y la eutanasia.

Considero una grave irresponsabilidad la presencia del Presidente del Gobierno y seis ministros de su Gabinete en la presentación de la película “Mar adentro”. Es un delito, recogido en el Código Penal, la asistencia al suicidio.

Zapatero debería saber bien que no representa tan solo a su ideología.

[Gartevi - 07 de septiembre de 2004 - 18:46]

Sobre todo el malo de Rubalcaba y Pepiño Blanco.

[Rafael P.T. - 07 de septiembre de 2004 - 18:45]

El odio que tienen los socialistas y comunistas al PP, lo hacen contra las personas, como ocurrio antes de la Guerra Civil. Y asi nos fué.

[Naterel - 06 de septiembre de 2004 - 11:53]

Han pasado seis meses desde las elecciones generales, y algunas de las personas que trabajaron más directamente con José María Aznar, en su equipo de asesores de La Moncloa, siguen teniendo problemas para encontrar una salida profesional apropiada, cuando no sufren auténticas persecuciones desde ámbitos del actual Gobierno.


La reciente contratación, por el Banco Bilbao Vizcaya, de uno de los principales asesores de Aznar en materia económica provocó la inmediata llamada telefónica al banco, desde fuentes gubernamentales, presionando para intentar hecha por tierra ese fichaje.



Otro caso llamativo es el de Ramón Gil Casares, diplomático de Carrera, que desde La Moncloa pasó a Asuntos Exteriores como Secretario de Estado, y que en el cargo actuó como el verdadero Ministro, y que ahora se encuentra refugiado en FAES porque en el Ministerio no le acaban de adjudicar un destino adecuado a su trayectoria profesional.



Y algo semejante le ha ocurrido al Alfredo Timermans, el que fuera Secretario de Estado de Comunicación, que decidió dejar el cargo antes de las elecciones, recibió entonces muchas garantías, y, sin embargo, tras la derrota del 14 de marzo, ha comprobado que se le cerraban gran parte de las puertas que parecían abiertas cuando gobernaba el PP.