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Manifiesto del PSOE. La basura laicista.

Manifiesto del PSOE. La basura laicista.

Por desgracia, hay una derecha "laicista" que no sabe lo que nos jugamos en el ataque del PSOE a la aconfesionalidad del Estado. Si fuera consciente del problema, ya habría convocado cien reuniones para contestar el documento del PSOE sobre la "laicidad" de la Constitución española. Puede que la derecha viva feliz engañándose con falsos agnosticismos y peores religiones privatistas, pero recuerde que no ha habido proyecto totalitario en el siglo XX que no haya tenido como primer objetivo terminar con la libertad religiosa. El comunismo y el fascismo son paradigmáticos de este ataque a la religión. Las formas derivadas de esos totalitarismos tampoco han renunciado a ese ataque a la libertad religiosa, que proceden de tiempos de la revolución francesa. Tampoco los diferentes intentos por implantar una república socialista en España, durante los años treinta, renunciaron a eliminar la libertad religiosa. Por el contrario, fue la pieza maestra para implantar el terror revolucionario y, posteriormente, la llegada de la guerra civil.

El ataque a la religión, bajo el pretexto de una aparente secularización, es una constante de todos los procesos revolucionarios; por fortuna, la filosofía política más avanzada de nuestra época nos ha mostrado los complejos mecanismos que llevan a los hombres a sustituir las genuinas formas religiosas por una "religión de la razón". Confiscar, sí, la libertad religiosa para revestirse con sus poderes es el principal objetivo de todos los totalitarismos del pasado siglo y del nuevo. Muchas corrientes de la derecha liberal, indirectamente, han contribuido a profundizar en esta patología, porque han creído que se terminaba con el problema reduciendo la religión al ámbito privado. Falso.

En este contexto de falsa secularización, privatismo religioso y mala asunción de una tradición católica española, que mejor que peor ha vertebrado culturalmente España y la ha hecho inteligible, tenemos que analizar el manifiesto del PSOE: "Constitución, Laicidad y Educación". Nadie lo tome a broma. La cosa es seria. Ese documento quiere arrinconar, definitivamente, lo que es la más importante tradición española, el catolicismo. Arremeter contra ella es, pues, una manera de cuestionar la democracia, porque la tradición católica está recogida en nuestra Constitución. El documento del PSOE es, definitivamente, antidemocrático, porque no está dispuesto a aceptar la Constitución, o sea, la laicidaddel Estado o lo que otros llaman la aconfesionalidad del Estado.

El verdadero núcleo del problema es que el PSOE quiere imponer una religión de Estado sin respetar confesiones y libertades religiosas. Por supuesto, los analfabetos "intelectuales" españoles, que han oído campanas sobre la necesidad de secularización de una sociedad para llevar a cabo un proyecto democrático, no prestarán demasiada atención al documento del PSOE, o peor, apoyarán con su silencio el ataque del PSOE a la libertad religiosa. A la libertad. Por este camino, la cosa está fea. Y, una vez más, habrá que confiar en la inteligencia de la Iglesia católica para defender las libertades. A falta de mayores reflexiones en los ámbitos de la derecha democrática, escéptica y retraída en este asunto hasta límites bochornosos, confiemos en que la Iglesia católica estudie y conteste con rigor democrático el documento publicado por el PSOE sobre la vinculación entre el laicismo y Constitución. Estoy convencido de que la calidad de la democracia española dependerá, en buena medida, de la respuesta que ofrezca la Iglesia católica a ese documento.

30 comentarios

Victor D. -

El laicismo nos excluye



Los sucesos acaecidos en varios centros escolares de España durante este periodo de Adviento, haciendo desaparecer belenes, han puesto de manifiesto que hoy se tiende a considerar que la laicidad comporta la exclusión de los símbolos religiosos de los lugares públicos destinados al desempeño de las funciones propias de la comunidad política: oficinas, escuelas, tribunales, hospitales, cárceles…

Pero el lugar más propio de la comunidad política es la calle que acoge la totalidad de la vida pública, y el símbolo religioso más notorio, claro y ostentoso es una Catedral, una Mezquita o una Sinagoga.

Si el concepto se desarrolla con coherencia no es que tengan que desaparecer los crucifijos de los despachos cuyo titular es circunstancialmente un cristiano, sino que tendrán que demolerse los templos de culto y desautorizarse la creación de otros nuevos, porque el que se siente molesto al pasar por delante de un belén colocado en su escuela, también se siente molesto al pasar por delante de la Iglesia parroquial de su barrio.

Este laicismo no es el garante de una democracia liberadora sino, al contrario, garantiza la opresión totalitaria y la vuelta a las catacumbas.

Tomás Moro -

Es muy preocupante el lenguaje stalinista de la nueva "progresía" gobernante. A estas alturas del nuevo mundo del sigloXXI, causa estupor unas barbaridades del calibre que los socialistas han expresado en ese "brillantísimo" papel. Uno ya no sabe qué se lo que hemos hecho los españoles para merecer este castigo casi "bíblico" por el que se nos arroja después de casi cincuenta años a las cavernas de nuestro pasado más trágico, al desentierro de nuestros odios y nuestros muertos y a la exaltación de un laicismo que pretende adueñarse de nuestras ideas, de nuestros pensamientos, de nuestras creencias y de nuestras ideologías para "dirigirlas" desde el "politburó" de Ferraz. Algo empieza ya a ser axfisiante en España...

charles -

El nacional-laicismo del PSOE es, como todo lo que hacen los progres, contradictorio consigo mismo. Han sido los laicistas del PSOE los que han reintroducido en la legislación española la discriminación por razón de sexo. En cuanto al aborto provocado, nunca ha dejado de ser delito, únicamente ha dejado de ser castigado en algunos supuestos.

Miguel Rivilla -

No ha sido mera casualidad el que tanto la CEE, como varios prelados españoles entre ellos los cardenales de Sevilla, Madrid y Toledo, hayan alertado, últimamente, en sus pastorales, homilías e intervenciones en diversos medios, del malestar creciente que siente la Iglesia española ante «el laicismo radical» y «negación oficial de Dios», propiciado por el Gobierno socialista y presidido por el señor Zapatero. No se trata ya del «casposo anticlericalismo» de otra época –en frase del ex alcalde de La Coruña, señor Vázquez– cuanto de algo más serio, como es el «intento de erradicación» de la presencia cristiana en la escuela, la familia y la sociedad. Da la impresión de que parte del PSOE vuelve a tropezar en la misma piedra de persecución a la Iglesia, como aconteció en la República y en los prolegómenos de la guerra del 36. Es verdad que hoy no se queman iglesias, ni se mata a frailes, ni se persigue a fieles católicos, pero es evidente, para el que tenga ojos en la cara, que hay una larvada y sutil persecución, oposición y desafección en las leyes, en los medios y en el trato, para todo lo que supone cristianismo y catolicismo. A pesar de la aparente normalidad que se pretende exhibir –de cara a la ciudadanía– entre el Gobierno y la Santa Sede; los obispos y los ministros socialistas, la realidad es que existen serios motivos de preocupación por el rumbo y deriva que van tomando las cosas en nuestra querida España.

Gregorio Fernandez D. -

El perro de Pavlov vuelve a ser protagonista de nuestra actualidad política y social. Los obispos firmaron la semana pasada un documento con destacadas orientaciones morales para el presente histórico; y el sector laicista del partido en el Gobierno, el partido social de los socialistas, ha contraatacado. Es la política del estímulo y de la respuesta. El problema no está en el estímulo, que es propio de la motivación y del ejercicio de compromiso con los retos de la actualidad; la fractura está en la respuesta. El laicismo rampante ha dado suficientes muestras, en la España contemporánea, de no creer en la realidad. Aprovechan cualquier oportunidad, como por ejemplo la celebración del aniversario de la Constitución española, para dar cerrojazo a los principios sobre los que se articuló no sólo la Carta Magna sino el desarrollo y el bienestar de la sociedad española. Resulta curiosa la obsesión del PSOE por hacer creíble la máxima marxista de que cuanto peor, mejor. Al laicismo rabiosamente anticlerical, y antieclesial, no le importa ni la historia, ni la Iglesia, ni la religión. Lo único que le preocupa es su supervivencia. Ha llegado el tiempo de la venganza; no de la construcción, ni de la reconstrucción, si acaso de la destrucción.

Al PSOE de Zapatero ahora se le ve el lobo, debajo de la piel de cordero

Antonio Agudo J. -

Muchos observadores venían diciendo que el sarampión anticlerical era cosa de la primera parte de la legislatura, y que ahora tocaba centrismo y entendimiento, con el fin de llegar a las elecciones en un clima de cierta serenidad con el mundo católico. El apunte parecía sensato, pero la realidad de este PSOE se empeña en frustrar el empeño de los optimistas.

La ocasión de exhibir un nuevo ataque de laicismo se la ha brindado paradójicamente el XXVIII aniversario de la Constitución del 78, la misma que sirvió, entre otras cosas, para cerrar la llamada "cuestión religiosa", consagrando la aconfesionalidad del Estado y el principio de colaboración de las instituciones públicas con las confesiones religiosas, especialmente con la Iglesia católica. No es ningún secreto que al PSOE le incomoda desde hace algún tiempo la formulación de estos principios en nuestra Carta Magna, y sus portavoces no se recatan a la hora de explicar que aquello fue una anomalía fruto de la dificultad de aquel momento histórico. Vamos, que ellos pagaron una especie de peaje para evitar problemas, pero que ya es hora de deshacer el entuerto.

Lo curioso es que esta vez han optado por una especie de lectura creativa del texto del 78, naturalmente a la luz de la Constitución republicana del 31 que cercenó gravemente la libertad religiosa y que fue una de las semillas de nuestro enfrentamiento civil. Pero al PSOE le gusta mirarse en ese espejo, a la vista está, y nos presenta ahora aquella malhadada Constitución como la fuente original de la que mana nuestro ordenamiento actual. En primer lugar, eso es un disparate histórico, pero además el hecho de que busquen allí su inspiración actual causa verdadera desazón. Porque una cosa es que a Álvaro Cuesta y sus muchachos les salga periódicamente el acné laicista, y otra es que el PSOE asuma como propio, para festejar la Constitución de todos los españoles, un manifiesto que la falsifica brutalmente, que rompe un consenso básico de la Transición y que nos ofrece lindezas tales como que hay que estar prevenido frente a los fundamentalismos monoteístas, o que gracias al laicismo se ha podido combatir el maltrato contra la mujer.

El debate sobre la Educación para la Ciudadanía no es una anotación al margen, sino que está en el centro de este nuevo episodio. De hecho Álvaro Cuesta ha reconocido que el manifiesto se ha hecho para defender esa asignatura, cuya pretensión no es enseñar los valores constitucionales (como arteramente ha dicho) sino modelar un nuevo esqueleto alternativo de valores, al margen de la voluntad y la libertad de los padres, es decir, de esta sociedad a la que pretenden modificar desde el poder. El PSOE sabe que hoy por hoy, el único obstáculo consistente y de fondo a su proyecto cultural es la Iglesia Católica, y por eso está en su punto de mira, más allá de las buenas intenciones de algunos de sus miembros o de las estrategias coyunturales de cada momento.

rubio fredre -

En el "Manifiesto de laicidad" se ve como el PSOE usará la escuela para adoctrinar a los niños

Profesionales por la Ética analiza su aplicación en Educación para la Ciudadanía: podrían suspender a los niños que se opongan al ideario socialista.


La asociación Profesionales por la Ética, promotora de la Guía de Objeción de Conciencia para padres frente a la asignatura “Educación para la Ciudadanía”, ha estudiado las claves ideológicas del Manifiesto “Constitución, Laicidad y Educación para la Ciudadanía” publicado por el PSOE con motivo del 28º aniversario de la Constitución Española y ha llegado a las siguientes conclusiones:


- Los contenidos de Educación para la Ciudadanía instruirán a los alumnos en los nuevos derechos del Gobierno Zapatero: aborto, matrimonio entre homosexuales y exclusión radical del hecho religioso porque, según el PSOE, las religiones son la causa de todos los males del mundo (maltrato a la mujer, discriminación por razón de sexo...).

- Al tratarse de una asignatura evaluable y obligatoria, los alumnos que no asimilen los contenidos impartidos podrán perder su beca escolar o repetir curso o, simplemente, ser suspendidos por no compartir las ideas del Gobierno socialista.

- La nueva materia escolar ignora absolutamente el artículo 27. 3 de la Constitución Española, que reconoce a lo padres el derecho a que sus hijos reciban la formación religiosa y moral que esté de acuerdo con sus propias convicciones.



Según Jaime Urcelay, presidente de Profesionales por la Ética,, nos encontramos ante un intento evidente e insólito de transformación de la sociedad mediante el adoctrinamiento obligatorio en la escuela. «La referencia a la Constitución de la Segunda República –ha asegurado Urcelay- no es accesoria en absoluto. No hay que olvidar que fue Rodolfo Llopis, Director General de Enseñanza Primaria del Gobierno republicano-socialista y después Secretario General del PSOE, el que lanzó en aquel momento político la conocida y tremenda consigna: ‘¡hay que apoderarse del alma de los niños!’».

Asimismo, Profesionales por la Ética, recuerda que, ante este descarado proyecto de imponer obligatoriamente la doctrina Zapatero en las escuelas, seguirá promoviendo la objeción de conciencia de los padres para que sus hijos no sean manipulados ideológicamente.

Profesionales por la Ética es una asociación miembro de la Federación Iberoamericana de Profesionales por la Ética.

ñaño -

Creo que el manifiesto es una forma más de "salirse del tiesto"; un intento de llevar a la Constitución algo que no está en la misma. Ya está expresado el carácter "aconfesional del Estado; pero eso no tiene nada que ver con el carácter "laico" que se pretende asignarle y del que nada habla la carta magna. Si la Constitución en ese y otros extremsos ha de reformarse que se haga; pero con las formalidades legales, y no "por arte de magia" como se insinúa. Las urnas otorgan determinadas facultades; pero nunca el quebrantamiento de las leyes, algo que se pretende a veces por vía indirecta, osea "con nocturnidad y alevosía".

Sancho Fernandez -

Según el articulo 16 de la Constitucion "Los poderes públicos tendrán en cuenta las creencias religiosas de la sociedad española y mantendrán las consiguientes relaciones de cooperación con la Iglesia Católica y las demás confesiones ". Sr Zapatero la Constitucion dice eso y su Gobierno en vez de "cooperar" con la religion católica, lo que hace es perseguirla en todas sus manifestaciones. En el preambulo se dice "Proteger a todos los españoles y pueblos de España en el ejercicio de los derechos humanos, sus culturas y tradiciones, lenguas e instituciones." No son perseguidas las tradiciones católicas ??. Permitame que ponga en duda que la Constitucion se esté cumpliendo ultimamente al menos con rigor....todo lo contrario.

zares -

El manifiesto es una muestra más de la coherencia y atención a los verdaderos problemas del país propias de este gobierno: Como en el país africano donde se practica un mayor porcentaje de ablación a la vice y a otras lo único que se le ocurrió es echarse unos bailes; como en los países donde se ejecutan a homosexuales o se les persigue hay unos dirigentes amiguetes... es lógico que ahora el Sr. Rodríguez y cía nos recuerden que sin el estado laico por él proclamado en España seguiríamos con la ablación de clítoris, colgando y apaleando homosexuales, en fín, prácticas tan arraigadas en nuestra cultura confesional.

riky -

La cuestión no es laicismo si o no, sino qué dice la Constitución sobre el laicismo. El art. 16.3 de la Constitución establece la no confesionalidad del Estado, lo que implica reconocer la existencia de un hecho religioso (con independencia de las distintas corrientes a través de las cuales se manifieste) ante el cual el Estado no puede resultar indiferente. El laicismo, por el contrario, implica que el Estado no reconoce la existencia del hecho religioso y por tanto se mantiene por completo al margen del mismo. No es ni mejor ni peor, sino distinto. Por tanto, si se quiere un Estado laico, debe promoverse una modificación de la Constitución, pero no se puede interpretar que donde dice Estado no confesional, quiere decir Estado laico, porque las consecuencias jurídicas son muy distintas.

carles -

La obsesión de este gobierno radical con la Iglesia en particular y los católicos en general es tremenda. Si por ellos fuera prohibirían la religión (la católica, claro). De todas maneras no sé porque se asombra la gente. Durante la guerra civil las izquierdas, sobre todo socialistas, comunistas y anarquista mataron a más de 7.000 sacerdotes, reliogiosos y monjas. Además quemaron miles de iglesias, conventos y monasterios. Prohibieron las celebraciones religiosas. Te asesinaban sólo por ir a Misa. No ha dicho zp que quiere volver al pasado. Pues ya está. En todo caso y como posdata: La Iglesia Católica ha sobrevívido 2000 años a persecuciones, prohibiciones...etc. Sobrevivirá también a este incompetente de zp. Una última cosa: zp está casado por la Iglesia. A que espera para anularlo.?

Maria F. M. -

CONSTITUCION, LAICIDAD Y EDUCACION PARA LA CIUDADANIA. Busco la palabra "laicidad" en el Diccionario de la RAE y resulta que no existe. ¡Menudos zoquetes!

Santiago Dominguez -

Sr. Zapatero: una cosa es una cosa y otra que tenga usted un cacao mental y nos quiera transmitir sus virus.
"Se trata de una oportuna reivindicación de la "laicidad" como elemento de relación básica entre los ciudadanos". Lo dice usted.
"Las creencias religiosas pertenecen a la esfera de lo privado. La religión no cuenta, no debe contar, en la esfera de lo público..." También es su opinión.
"Sobre esa base es muy saludable la promoción de los valores que inspiran la Costitución de 1978".Nueva aseveración suya.
Veamos:
Artº. 16.1 de esa Constitución: Se garantiza la libertad ideológica, RELIGIOSA Y DE CULTO DE LOS INDIVIDUOS Y LAS COMUNIDADES, sin más limitación, en sus manifestaciones, que la necesaria para el mantenimiento del orden público protegido por la ley.
¿Dónde esta el laicismo Sr. Zapatero?
Más aún: 16.3. Ninguna confesión tendrá carácter estatal. Los poderes públicos tendrán en cuenta las creencias religiosas de la sociedad española y mantendrán las consiguientes relaciones de cooperación con la Iglesia Católica y las demás confesiones.
¡Ya me dirá como casan, Sr. Zapatero, sus manifiestaciones y la vigente Constitución Española.

rubio -

Otra manera más del PSOE de distraer la atención con cortinas de humo para no ocuparse de las cuestiones que realmente preocupan a la ciudadanía: educación (laica o religiosa, pero que dejemos de estar en los últimos lugares de la OCDE), vivienda (queremos algo más que zapatillas para buscar piso), seguridad, inmigración, sanidad, pensiones... Nos están tomando el pelo con chuminadas camperas para que no veamos la pésima gestión que hacen como gobernantes.

Luis F. H. -

La influencia actual de la Iglesia Católica en este país es más importante de lo que el laicismo proclama, numéricamente hablando de fieles y mucho menos importante de lo que también proclama, hablando de relaciones sociales y de poder. Básicamente, lo que le queda a la Iglesia en influencia, se reduce a centros de ayuda a los necesitados (de los que nadie se acuerda) y a parte de la educación. Es, este último punto, lo que más le escuece a los laicistas. El que después de 30 años no haya podido controlar la educación al completo. Pues que le vamos a hacer, Señor Zapatero y demás del PSOE. ¿No será que en cuestión de educación, no solo los creyentes, sino también los laicistas envían a colegios privados o concertados católicos a sus hijos?. Pues nada. A derogar entonces el concordato del 53 y a construir masivamente escuelas públicas. ¿Con qué dinero?

kasero -

"Por otro lado, Zapatero busca arrasar con la historia y con las raíces culturales, sociales y religiosas de España, con el objeto de crear un Estado laicista sin referencias al pasado común y donde todo gire en torno a un "nuevo" modelo de sociedad excluyente y sectario. Para ello ha diseñado una educación partidista y partidaria con la que adoctrinar a los españoles de la cuna a la tumba."

Este señor se torea de golpe las constituciones de los paises mas avanzados y que en algunos aspectos no nos sacan 20 años, sino 200 años y tira por tierra lo que efectivamente fué en su momento romper con el pasado y sentar las bases de la sociedad moderna, la revolución francesa.

Que se dediquen a su labor pastoral y dejen ya de medrar.

hoy -

Según el que fue presidente de la República, don Niceto Alcalá Zamora, la Constitución de la Segunda República era
"Sectaria y hecha de espaldas a la realidad nacional" en la que "se procuró legislar obedeciendo a teorías, sentimientos o intereses de partidos, sin pensar en esa realidad de convivencia patria, sin cuidarse apenas de que se legislaba para España, o como si la constitución fuese a regir en otro país (…) Han hecho de la República, más que una sociedad abierta a la adhesión de todos los españoles, una sociedad estrecha, con número limitado de accionistas y hasta con bonos de privilegio de fundadores (…) se hizo una Constitución que invita a la Guerra Civil, desde lo dogmático –en que impera la pasión sobre la serenidad justiciera- a lo orgánico, en que la improvisación, el equilibrio inestable sustituyen a la experiencia y a la construcción sólida de los poderes."

Así acabó aquello; con el PSOE dando un golpe de estado en 1934.

pertur -

Si a alguien le molesta que una persona tenga ideas o pensamientos religiosos,y que los pueda proclamar frente a la sociedad,esta visto, que a los laicistas socialistas, mucho mas les molestara ,que una persona tenga ideas politicas distintas a las suyas, por lo que toda esta postura ,nos lleva al sectarismo y la dictadura como una forma de ver la sociedad,donde todo el mundo debe pensar lo mismo, y no dar señales de tener pensamientos propios, salvo los que los mandatarios de turno crean convenientes.
Es un dirigismo total de la sociedad, mediante lecturas como la asignatura de la Educación para la Ciudadania,donde se enseña lo que se debe pensar, y sobre lo que segun una ideologia determinada decide lo que esta bien o mal,y donde los padres tendran que enfrentarse a estos pensamientos ideologicos, de una politica determinada, si sus principios son contrarios a estas ideas politicas.
Es tal la aberración de estas manifestaciones de laicismo, que destruyen la idea de la cultura, tradición,e Historia de España,y aunque muchos lo niegen ,las pruebas son mas que visibles.

Ramon G. -

La Constitución de la Segunda República ni siquiera fue laica. Fue meramente anticatólica.


"Artículo 26.

[...]Quedan disueltas aquellas Ordenes religiosas que estatutariamente impongan, además de los tres votos canónicos, otro especial de obediencia a autoridad distinta de la legítima del Estado. Sus bienes serán nacionalizados y afectados a fines benéficos y docentes.

[...]Los bienes de las Ordenes religiosas podrán ser nacionalizados.

Artículo 70. No podrán ser elegibles ni tampoco propuestos para candidatos:

(...)
b) Los eclesiásticos, los ministros de las varias confesiones y los religiosos profesos.


Una Constitución que limita a los católicos el derecho de asociación, de propiedad o de ser candiatos, es el modelo de "democracia" para el PSOE. Y para el señor Zapatero.

Lo normal: si todavía celebran con entusiasmo su golpe de estado de 1934 ¿cómo no iban a festejar lo que de abiertamente antidemocrática y sectaria tenía la Constitución de la Segunda República?

Coherentes son, los tíos.
Pero ojo, todo esto solo son pasos previos a lo que quieren hacer. Otra República

yute -

No parece muy claro que el PSOE utilice el termino "laicista" con la acepción adecuada, sino más bién como ya hizo hace 70 años. A algunos socialistas les molesta las religiones, todas en general y la Católica en particular su vena anticlerical no la pueden disimular y aprovechan cualquier circunstancia para atacar las creencias religiosas.
Un estado laico es aquel que respeta todas las creencias y que pone los medios para que aquellos ciudadanos que lo deseen puedan practicar libremente su religión sin coacciones, persecuciones o discriminaciones.
En el PSOE hay aún por desgracia algunos personajes entre los que destaca el Sr. Rodríguez Zapatero que en su fuero interno no creen en un estado laico sino ateo, donde se persigan las religiones y a los que las practican debe ser por aquello de la "Memoria Histórica". Cuanto rencor y odio hay en el pobre ZP y lo peor es que hay gente que entra en su juego y asi nos va.

frede -

No lo entiendo ¿que tiene que ver el laicismo con la libertad e igualdad? Se lo podemos preguntar a los coreanos del norte o a los chinos. ¿que tiene que ver el laicismo con la multiculturalidad? si busca todo lo contrario?. Además ¿que diferencia este laicismo de la religión? tal como se plantea es sustituir una religión por otra, en este caso la búsqueda de la ausencia de religión que en el fondo también es una religión. Tan solo veo sustituir unos señores (además para mas señas católicos a los musulmanes ni tocarlos) que han ido atenperando su radicalismo por posiciones anticatolicistas radicales. En resumen de guatemala a guatepeor y encima justifica esta nueva religión en la Constitución.

javi -

Esto del laicismo viste mucho, bautizos civiles, primeras comuniones civiles, bodas civiles y finalmente entierros civiles. Todo ello muy progre y muy al estilo en uso, pero, hay un pero, todo ello copia y remedo de lo de siempre: bautizos por la iglesia, primeras comuniones por la iglesia, bodas por la iglesia y entierros por la iglesia. En fin llamemosle un monoteísmo laico y excluyente como los que dice erradicar. Cachondeos socialistas, de gente que debería emplear el tiempo haciendo otras cosas mas provechosas para el común de los españoles.

manuel Gimeno -

La confesionalidad de un estado no tiene porque suponer una merma de los derechos de los individuos, simplemente es el reconocimiento de una realidad, que la mayoría de sus ciudadanos profesan una deteriminada religión. Sin embargo, el lacismo si que supone una merma en los derechos de quien quiere profesar una religión. En cualquier caso, a lo que animo es a la coherencia. Imagino que como buen ateo laicista, Zapatero, Pepiño y demas del PSOE, trabajará el viernes, el día de Navidad, Reyes y Semana Santa. Y espero que no se le ocurra abasallar a su familia a regalos en ninguna de esas fechas. Por respeto no será, que haga lo que quiera, pero muy coherente no resulta.Aunque duela las raices de España son católicas, y lo serán siempre. No hay más que ver las catedrales. Claro q hace falta cultura.

R. H. J. -

Por razones profesionales me he sometido a la lectura de los tres últimos manifiestos del PSOE con motivo del aniversario de la Constitución. A saber, el de 2004, el de 2005 y el de 2006. Es decir, todos los que fueron redactados una vez instalado Rodríguez en La Moncloa. No recomiendo a nadie que atraviese tales desiertos de monótona prosa, pero quien lo haga notará que en ninguno de los dos anteriores se hacía referencia a los elementos que presentan este año como alma mater de la Constitución española: la Segunda República, la laicidad y la asignatura de Educación para la Ciudadanía. ¿Acaba de descubrirlos la dirección del partido? Si tan fundamentales son, ¿cómo los había ignorado hasta ahora? ¿Qué mosca o sondeo le ha picado al PSOE para que sustancie en ellos su –presunto– homenaje a la Carta Magna?

El caso es que el PSOE ha decidido conmemorar la Constitución mediante un texto cuyo aspecto central es un "principio constitucional" inexistente: la laicidad. Y no contento con sacarse ese principio de la manga, el manifiesto socialista lo eleva a requisito para la libertad y la igualdad. Cierto que Pepiño Blanco no cree que pueda extraerse tal conclusión del papelote. Pero no hay que extraerla: basta leerla. Hasta a Blanco le ha debido parecer extraña la lucubración. Incluso a él le sonará que hay democracias por ahí desprovistas del componente laico, donde la libertad y los derechos se respetan y garantizan. Y mejor que en esta. Dicen los sabios que la separación de poderes tiene mucho que ver en ello, pero los que querían enterrar a Montesquieu y aún lo sepultan todos los días es natural que no se acuerden de ese concepto. Como es normal, por desgracia, que quienes demuestran en su acción política su falta de respeto por la Constitución, la reinterpreten a su gusto y la celebren por lo que no figura en ella.

La confusión intelectual que revela este manifiesto del PSOE corre pareja a la literaria. Así se dice, por ejemplo, que los fundamentalismos religiosos "siembran fronteras". Aunque para fronteras, las que traspasan y emborronan los muñidores del texto. Según su criterio, donde no rige la laicidad dejan de ser delitos el maltrato a la mujer, la ablación o la discriminación por razón de sexo. Y por qué no la antropofagia vinculada a creencias animistas, o los atentados en nombre de la yihad. En fin. Pensábamos que esas y otras barbaridades estaban proscritas por ser contrarias a los derechos humanos y que se castigan en todo país civilizado, pero no. Los iluminados escribas de Libertades Públicas del PSOE hacen depender su prohibición de la laicidad. Aviados estamos. ¿Quién habrá sido el cerebro gris –y tan gris– del manifiesto?

Pero la lupa del análisis medianamente racional no es el instrumento adecuado para observar el bodrio. Este sólo adquiere sentido si se examina como producción propagandística. No importan las tonterías que se digan, ni los atentados a la razón y a la lógica que se perpetren. Importa únicamente el sonido de ciertas palabras: Segunda República, laicidad, ciudadanía, educación. Son palabra-fetiche, viejos juguetes remozados, más extemporáneos que nunca, con los que el PSOE de ZP hace frente al vacío: a la ausencia de principios ideológicos, a la debacle del clásico discurso socialista. Aunque son también, y esta es su parte ofensiva, los términos con los que quiere atizar la confrontación política.

Margarita Toledano -

¿Y si fuera lo contrario?

Por mucho que se empeñe el PSOE en presentarnos un manifiesto, con motivo del aniversario de la Constitución y que lleva por título “Constitución, laicidad y educación para la ciudadanía”, para denunciar que “manipula” y siembra “división entre españoles”, ya que sostienen que sin “laicidad constitucional”, en España se toleraría “el maltrato a las mujeres, la ablación o la discriminación por razón o sexo”.

Parece que dan a entender que todos estos males los provoca la Religión. ¿Y si fuera verdad lo contrario? Porque desde que están intentando apartarnos de nuestras raíces culturales que fundamentan el cristianismo están aumentando en gran porcentaje justo lo que ellos nos quieren manipular, el maltrato y muertes por violencia de género, la violencia escolar, tanto a profesores como a alumnos, no digamos las muertes de seres inocentes provocadas por el asesinato de los no nacidos en el vientre de sus madres, no sigo porque si no me alargaría demasiado, pero en las mentes de todos esta la situación de actual de nuestro país.

Siempre se ha dicho que un hombre sin conciencia suele acabar como una bestia acorralada.

huesca -

Laicismo es la ideología intolerante que trata de apartar la religión de la´sociedad y reducirla a la práctica de la intimidad. Prohibición crcifijos, belenes y villancicos en centros educativos, etc

Laicidad alude a la aconfesionalidad y a la libertad religiosa. En cuatro ocasiones se ha pronunciado el Tribunal Constitucional en este sentido de libertad religiosa.

Al PSOE le molesta la libertad y la discrepancia, incluso en sus propias filas. Hasta han expulsado a militantes por pedir primarias para la elección de candidatos a las municipales.

breda -

El PSOE proclama un fundamentalismo que pretende negar el importante papel de la Religión en la vida de las personas y de las sociedades


El Foro Español de la Familia (FEF) aseguró ayer que si la asignatura “Educación para la Ciudadanía” va a responder a los principios del manifiesto del PSOE, presentado en Málaga, es "imprescindible" plantear la objeción de conciencia, ya que se trata de "una expresión del fundamentalismo laicista contrario a los derechos y libertades recogidos en la Constitución".

"Frente a una Constitución que garantiza la libertad ideológica y religiosa y la relación de los poderes públicos con las confesiones religiosas, el PSOE cae en un fundamentalismo que pretende negar el papel de la Religión en libertad en la vida de las personas y de las sociedades", aseguró el vicepresidente de esta organización, Benigno Blanco.

En esta línea, afirmó que el manifiesto del Partido Socialista "pone de relieve que las denuncias, realizadas por el FEF y otras instituciones familiares y sociales, sobre el riesgo de adoctrinamiento ideológico que supone la nueva asignatura de “Educación para la Ciudadanía” están plenamente fundadas.

Según precisó Blanco, el manifiesto establece que "los poderes públicos podrán utilizar la nueva asignatura para formar conciencias en un mínimo común ético". "El PSOE ignora que son los padres los responsables de formar conforme a sus convicciones las conciencias de los niños, y no el Estado", añadió.

“Manipulación y ruptura de la Constitución”

Por otra parte, el presidente de la asociación E-cristians, Josep Miró, calificó de "nefasto" el manifiesto que el PSOE presentó en Málaga titulado 'Constitución, laicidad y Educación para la Ciudadanía' a raíz del XXVIII aniversario de la Constitución Española.

En declaraciones a Europa Press, Miró aseguró que se trata de una "manipulación y una ruptura de la Constitución", ya que ésta es "aconfesional, pero no laicista" y responsabilizó al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, de una "manifiesto impresentable y de una demagogia brutal".

Según Miró, el PSOE tiene que "contrarrestar" su paso a la "derecha" en materia de economía con un "sentimiento antirreligioso" y medidas como el matrimonio entre homosexuales. "El PSOE ha quedado desarmado en la justicia social, su política es ahora intercambiable con la del Partido Popular", añadió.

El presidente de E-cristians afirmó que este manifiesto es "incompatible" con la Alianza de Civilizaciones impulsada por Zapatero. Miró recordó que Zapatero había hecho un "elogio del hecho religioso" durante el discurso que pronunció hace más de tres semanas en Turquía durante un acto de la Alianza. "No puede ser que el Islam sea positivo en Turquía y el catolicismo no lo sea en España", concluyó.

El PSOE es así, caos, caos y caos.

avelto -

Es importante definir bien los conceptos.
Laicismo e suna ideología que aboga por meter en el armario, excluir, toda actividad religiosa. Buenos laicistas fueron tal vez Stalin, el modelo del PSOE cuando el intento de golpe de Estado del año 1934. (El PSOE aún no ha pedido perdón por este golpe de Estado fracasado.
Por ser manipuladores o por ignorancia el PSOE, en su fobia a los que no piensan como ellos, a la libertad de pensamiento, monta cada una. Ahora ha sido el manifiesto este, antes la “Educación para la Ciudadanía”, y antes negar la libertad de educación en la práctica para millones de familias, condenadas a una escuela comprensiva de fracaso escolar, ruina académica, y los profesores sindicatos de profesores, en su mayoría callan, resisten, tal vez, esperando que los libere el sindicato o ser inspectores o …

Pero laicidad significa, como la recoge la Constitución, y que avalan ya cuatro sentencias del Tribunal Constitucional, se recoge la libertad...

A. G. -

He recibido por e-mail el Manifiesto del PSOE con motivo del XXVIII aniversario de la Constitución, y he empezado a leer. Y cuando he llegado al apartado de Lacicidad, me he preguntado pero ¿qué es esto?

Primero por la definición, a saber: "Laicidad se configura como un marco idóneo y una garantía de la libertad de conciencia donde tienen cabida todas las personas con
independencia de sus ideas, creencias o convicciones y de su condición personal o social, siendo por ello requisito para la libertad y la igualdad", que se confunde con la de Democracia.

Y luego por el siguiente parrafo "Sin laicidad no habrían nuevos derechos de ciudadanía, serían delitos civiles algunas libertades como la interrupción voluntaria del embarazo, el matrimonio entre personas del mismo sexo,… y dejarían de ser delitos el maltrato a la mujer, la ablación o la discriminación por razón de sexo." ¿Pero desde cuando la lacidad o viceversa, aseguran unos derechos fundamentales? Sera el Estado de Derecho el que asegure estos derechos. Además, la Lacidad se presenta como marco de libertad legal del aborto, el matrimonio entre homosexuales y la ablación, cuando la libertad legal no es la Libertad, sino un espacio donde no es punible una acción.La libertad para hacer lo que sea sin que detenga no hace que se haga algo libremente. Para colmo cuando se pone a la religión (a la religión Católica implicitamente) como realidad coartadora, cuyo objetivo es cambiar las leyes. Si la Iglesia está en contra de estas realidades es porque cree que van contra los derechos de los ciudadanos, no porque quiera obligar a su cumplimiento a toda la sociedad.