Blogia
ametralladora

Rajoy asume la representación de 148 escaños contra la ruptura de España: "Haré lo que esté en mi mano"

El Estatuto se tramitará pero Mariano Rajoy y 146 votos en contra (hubo 2 ausencias) fueron los protagonistas de 10 horas de debate.

 Todos los grupos defendieron el texto usando como antítesis los argumentos del PP. La única aportación concreta sobre el texto la hizo el presidente del Gobierno: "nación" será "identidad nacional". Rajoy bautizó la maniobra con una paradoja: "independentismo constitucional" y concluyó diciendo que un parlamento autonómico no puede imponerse al pueblo español. Zapatero y Rubalcaba no dudaron en recurrir al 11-M. Lo que más dolió al portavoz socialista es que Rajoy no le escuchara. Compare los discursos de Rajoy y Zapatero

Más que el debate de toma en consideración de una reforma estatutaria, lo visto ayer en el Congreso de los Diputados parecía una cuestión de confianza contra el líder de la oposición. Mariano Rajoy lo advirtió desde el principio y dejó claro que la soledad de su discurso no se refleja en el reparto de votos de los españoles: "Con la Constitución en la mano no cabe error sobre quién posee un poder original y quién un poder delegado. No existe más que un poder soberano que no renuncia a la propiedad, ese poder que ustedes representan lo ejerce exclusivamente el pueblo español constituido en nación. Ante él nadie habla de igual a igual".  

Lo cierto es que tras 10 horas de debate, más las dos de la ponencia celebrada por la mañana, el Estatuto ha sido aprobado por 197 votos a favor, 146 en contra y una abstención. Es decir, atendiendo al reparto de poder establecido, casi el 43 por ciento de los españoles representados en los escaños del Congreso también se quedaron solos junto a Rajoy defendiendo la unidad de España frente al nuevo Estaturo catalán que se propone. Los dos votos que le faltaron al PP se deben a ausencias por enfermedad. La abstencion parece atribuirse a una equivocación socialista.

“¿Qué le puedo decir a este buen hombre?, dijo Rajoy (sorprendentemente, Rubalcaba lo interpretó como un insulto). “Uno viene al debate con la lógica preocupación, pero tras escuchar, lo que era una duda ahora es una certeza, usted no sabe a dónde va a llevar a España, nos dijo que iba a delimitar las líneas y se ha limitado a un conjunto de vaguedades, apelaciones vacuas al dialogo y ninguna cuestión concreta”. Era el último turno de réplica del presidente del PP y en él constató que la hora de la verdad llegará cuando tengan que votarse las enmiendas y el PP rebata cada una de ellas. Lo adelantó en su primer discurso: "No nos vamos a desentender, vigilaremos cada paso que se dé". También quiso dejar claro que pese a los ataques recibidos, diez millones de votos tienen voz y la persona que los representa tiene "el derecho a expresar su opinión".

Rajoy aseguró que Zapatero no “ha aclarado nada españoles, no hay hoja de ruta, no hay timón, le toca pilotar el proceso y no puede mantener a la sociedad en vilo sobre su sistema de convivencia en el futuro. Hoy hemos visto que el problema es usted. Y no es que haya estado especialmente desafortunado, que lo ha estado, es que se ha convertido en un problema para sociedad española”.

Señaló que “es moralmente reprobable” que se le califique de “anticatalán, antidemocráta y de falta de respeto al Parlamento catalán por defender criterios distintos” a los planteados por el resto de los grupos. “Querría más argumentos, más razones y menos tópicos. Quiero para los ciudadanos de Cataluña lo mismo que quiero para mí. Y voy a hablar en nombre de los ciudadanos de Cataluña en el Parlamento nacional y también en Cataluña”. Reiteró que cree en la Constitución de 1978 y dijo no entender por qué “otra vez tenemos que volver a discutir lo que somos”. “El mundo ha cambiado, vayamos con el mundo. Apostemos por las personas y no por competencias para los territorios”, dijo el dirigente popular que señaló que rechaza el Estatuto por que “es malo para Cataluña”. “Y lo digo porque lo creo y tengo derecho a decir lo que creo igual que los demás tienen derecho a decir lo que piensan”.
Rajoy articuló su réplica en que su crítica al Estatuto va más allá del reparto de competencias. “Claro que podemos hablar de financiación, de inversiones, claro que se puede hablar de transferencias, de lo que hablamos es de unidad de mercado, de la no existencia de fronteras y de las libertades individuales”.
Ante las acusaciones de faltar al respeto al Parlamento y las instituciones catalanas, Rajoy fue claro: "Yo no soy anticatalinista, ni soy antidemócrata, ni falto al respeto al parlamento de Cataluña". Y añadió que “me he referido con todo respeto a la proposición, lo diría exactamente igual si viniera de mi pueblo, de Galicia, o de Murcia, lo que critico es el contenido intervensionista y nacionalista”. En referencia a Carod y Mas dijo que “no me extraña nada que tenga el apoyo de sus grupos, lo que no puedo entender es que esto tenga el apoyo del PSOE”.
Citó “el demoledor artículo de una persona que nunca ha votado ni creo que vaya votar al PP” que publicó un diario catalán. En el artículo criticaba el Estatuto “no por su inconstitucionalidad, sino por su espíritu, que es el triunfo del nacionalismo”. Y siguió citando que “esta no es mi guerra, más de uno me considerara enemigo de Cataluña” y lamentaba que Maragall le haya engañado “bajo la rúbrica de la  España plural”. Y volvió a remarcar: “No puedo entender por qué el PSOE ha votado esto en Cataluña”.
Dirigiéndose directamente a Zapatero, Rajoy le dijo que "hoy he vuelto a tender la mano, especialmente al PSOE, pero lo que se nos propone es que renunciemos a algo sólido, la tradición de consenso de los dos grandes partidos en materia territorial, a cambio de una aventura sin rumbo, de no se sabe quién ni por qué, como no se da cuenta, señor presidente”. El líder del PP, finalizó su encendida réplica, señalando que “no sé lo que podré hacer yo, pero desde luego haré todo lo que esté en mis manos para que España no salga de una senda de la que nuca debió salir que es la del consenso constitucional y la del espíritu de la transición”. 
Zapatero cerró el debate reiterando su reconocimiento a la “identidad nacional” de Cataluña y expresó que el proceso de reforma del Estatuto “culminará con éxito para ofrecer a próximas generaciones una Cataluña fuerte, con más autogobierno y con una identidad reconocida” con la mejor predisposición del gobierno”. Zapatero concluyó pidiendo al PP que “reconozcan la identidad nacional de Cataluña que es evidente y es bueno para todos”. Las últimas palabras del presidente del Gobierno fueron para recordar que Cervantes ya citaba la nación. También lo hizo Carod Rovira pero en otro sentido: "Ladran, Sancho, luego cabalgamos", dijo para acabar su turno.

23 comentarios

Mercedes Piñón -

Con repetitiva cantinela nos repite una y otra vez la vicepresidenta del Gobierno que el PP está solo. Confieso que me recuerda aquel chiste de nuestra infancia en el que 60.000 hombres iban amargamente llorando y cuando les preguntaban «¿por qué lloráis?», ellos contestaban: Es que caminamos por el desierto, y estamos solos.
Olvida o desconoce la vicepresidenta que el recuento de los votos, hoy por hoy, es como el del pan. Con tal de que baje la balanza se puede compensar un solo pan con un montón de mendrugos y mijgajas. ¿Acaso será peor la condición del pan entero por venir de un solo trozo?
No pretendo explicar a la vicepresidenta la conclusion lógica del peso específico del pan. Podría contestarme con un rodeo verbal de 60.000 palabras, creyendo ella misma que en su difusa materialidad, dejaba en triste soledad la simple y llana claridad de la evidencia.

Jorge V. M. -

El socialismo gobernante y sus aliados están poniendo las bases para afrontar ese vuelco histórico con garantías. Y para ello dicen que el marco jurídico actual está superado por la realidad, que los principios que lo iluminaron han muerto, y que es necesario pergeñar otros. Por esto el Ejecutivo y su acompañantes desdeñan los informes de instituciones judiciales y consultivas, convierten una vez más un debate parlamentario en un ataque unánime al partido de la oposición, llaman fascistas a los que defienden la integridad de la Constitución democrática, y hablan de catalanofobia, vascofobia, gallegofobia, canariofobia y qué sé yo.

El vuelco histórico que se avecina es mucho más que inquietante. Y esto no es apocalíptico, es el resultado de la incertidumbre creada por el deseo de unos políticos de perpetuarse en el poder no a costa de trabajar para el buen gobierno –lo que es su obligación y para eso se los eligió–, sino de introducir los cambios institucionales y legales suficientes para hacer imposible la alternancia. Cuidado: lo lamentable de la superficialidad de los discursos de Zapatero no está en lo que dice, sino en lo que oculta. (FIN)

Jorge V. M. -

Ese nuevo Estado se fundaría en la soberanía de los pueblos de España, no de la nación española. Cada pueblo de las Españas podría definir su identidad; es decir, constituirse en región o en nación, con independencia de la opinión del resto del país. Ser español sería como hoy ser europeo, un sentimiento supranacional, casi geográfico. La confederación de naciones supondría redibujar el mapa atendiendo a identidades basadas en las peculiaridades culturales y en la historia medieval.

Las instituciones comunes carecerían de verdaderas competencias porque cada identidad nacional convertida en Estado federado asumiría prácticamente todas, conservaría derecho de veto y participaría en las decisiones estatales. De esta manera, el Congreso de los Diputados y el Gobierno cederían protagonismo al Senado; de ahí el interés de Zapatero de reformar la cámara alta al gusto de los nacionalistas, e introducir este cambio en el mismo paquete que el de la sucesión de la Corona. Esto es lo que les lleva a sostener la existencia de la nación española exclusivamente en la Constitución de 1978: con su modificación todo es posible. (continua....

Jorge V. M. -

Legítimo y democrático es que el Parlamento de Cataluña haya elaborado un proyecto de reforma de su Estatuto y, como tal, dicen, hay que aceptarlo. Bien, pero más legítimo y democrático será lo que las Cortes recorten y reformen de ese proyecto, porque esto es lo legal, lo constitucional, lo conveniente y, porque solamente en el Parlamento español reside la soberanía. De esta manera, no caben las amenazas de los nacionalistas catalanes, las “consecuencias imprevisibles” si se “amputa” su proyecto. El silencio del gobierno Zapatero a esas palabras tan gruesas responde a que, en el fondo, le anima el mismo proyecto: otro Estado y la perpetuación en el poder.

La verdadera cuestión que se está dilucidando no es si los políticos de Cataluña podrán disfrutar de un Estatuto a su medida. Los socialistas de Zapatero han abierto la puerta de atrás para cambiar el Estado de las Autonomías por una confederación. No se trata siquiera de una reforma constitucional encubierta, sino de pasar a otra organización política. El paradigma sería una amalgama entre el federalismo socialista de Anselmo Carretero y Suso del Toro, y la ideología nacionalista desde Arana y Prat de la Riva a Reventós. (continua....

A. M. -

Ese poder no es otro, como cualquier demócrata sabe y Rajoy justifica en su discurso, que el pueblo español constituido en nación. He ahí la lección más grande de democracia que el ciudadano español puede recibir de un político: el pueblo español preexiste a cualquier otro tipo de poder. La soberanía del pueblo español es previa incluso a la Constitución. Eso es, precisamente, lo que pretende robarnos Zapatero y los independentistas catalanes.

Muchos temas y fundamentales toca este discurso, que tiempo habrá de comentar, pero me parece imprescindible su crítica al totalitarismo político contenido en el proyecto de Estatuto para Cataluña. A partir del texto de Rajoy uno puede comprender fácilmente cómo los nacionalistas y socialistas están lejos de aceptar el principio clave de la modernidad, a saber, los derechos son de los individuos o no son. (FIN)

A. M. -

“Esperanza”, sí, es la primera contribución del discurso de Rajoy para unos ciudadanos, que nos sentimos inmersos en una fatalidad, patrocinada por unos liberticidas que defiende antes unos extraños “derechos de los pueblos” que los derechos individuales, los derechos. “Esperanza”, de verdad, o sea, libertad es lo que rescata el discurso de Rajoy de la fatalidad antiespañola, que fomenta la palabrería reaccionaria y tergiversadora de Zapatero y los independentistas para mantenerse en el poder. “Esperanza” genuina, o sea libertad, es lo que extrae Rajoy del único poder legítimo de la democracia española: “Un poder que no admite parcelas, que no se divide, que no se comparte. Un poder que delega voluntariamente sus potestades, pero no renuncia a la propiedad. Ninguna instancia delegada es propietaria del poder que recibe.” (continua....

A. M. -

Es inevitable hablar del Discurso de Rajoy. He leído los suficientes discursos parlamentarios para saber que estamos ante uno de los más grandes en la historia reciente de España. Para saber qué pasa en España, resulta, pues, necesario leer y estudiar esta pieza política. Propagar de modo ilustrado las ideas expuestas ayer por Rajoy será la mejor manera de enfrentarse a la propaganda nacionalista, sectaria y anticonstitucional de socialistas e independentistas. Rajoy Se atuvo al asunto jurídico tanto como al estrictamente político, no utilizó en vano la historia reciente de la democracia española, y apartó los sentimentalismos a un lado. Hizo un magistral discurso sobre la viabilidad de la democracia en España. Rajoy escribió un discurso sencillamente extraordinario. A su lado todo era faramalla. Mentira.

Nadie con un poco de sensibilidad puede dejar de reconocer la inteligencia y moralidad que alberga este texto. Si la política es, como dijera Ortega, tener una idea clara de lo que se debe hacer desde el Estado en una nación, entonces Rajoy es el único que sabe qué es la política en España. Demostró con creces que gracias a la palabra, al poder creativo de las palabras bien dichas y argumentadas, los españoles de bien aún podemos albergar una expectativa, o mejor, una esperanza cabal y cierta en la nación española. (continua....

Antonio Garcia -

En los años sesenta luché activamente, primero de forma clandestina y luego abiertamente, por la recuperación de las libertades democráticas. No soy militante ni votante del PP pero, por profesión de fe democrática, estoy en contra de las siguientes prácticas:

- De pactos como el del Tinell, por los cuales se ningunea e impide llegar a ningún tipo de acuerdos con un partido democrático que representa a más del cuarenta por cien de la población del estado.

- De que, para desprestigiar al PP, continuamente se le esté acusando de ser heredero y continuador del franquismo. El debate político ha de hacerse con argumentos y no con etiquetas.

- De que, sin pruebas y en contra de lo explícitamente manifestado por sus dirigentes, se le atribuya el origen de la campaña de boicot a los productos catalanes. Y aunque no me gusta ni estoy de acuerdo con el conductor de "La mañana" de la COPE, tampoco estoy de acuerdo con que se la quiera cerrar por sus ataques a Cataluña o al Estatut.

- En un estado democrático de derecho no puede cercenarse la libertad de expresión; y si se opina que alguien miente o insulta, lo que hay que hacer es acudir al código penal y a los tribunales de justicia.

Creo que cuando se desea desacreditar o silenciar a la discrepancia, es porque se es mucho menos demócrata de lo que se afirma o aparenta.

Avilés -

Por lo que se lee, se ve y se oye es un buen momento para hablar, incluso con vehemencia, sobre la libertad y las múltiples oportunidades que tenemos para ejercerla. Considero clave una de sus facetas que es el derecho constitucional a informar y estar informado.

Si es verdad que somos una sociedad democrática adulta, parece obvio tener diversas versiones de los hechos importantes que ocurren a diario. Es muy sano poder contrastar noticias en diversos medios de comunicación, también con opiniones contrarias al poder político establecido.

Ya sabemos que pueden haber intereses e ideas diferentes, pero seguro que podremos encontrar coherencia y argumentaciones sólidas en personas que opinen de forma contraria y quizás nos ayuden a comprender a los demás y construir así una mejor convivencia. Por eso ruego a los políticos que nos dirigen que salvaguarden e incluso aumenten las posibilidades de elegir en libertad, ¡COPE sí, gracias!

frase II -

Mariano Rajoy (PP):

Lo que no puedo entender es que esto tenga el apoyo del Partido Socialista Obrero Español. No lo puedo entender.

Usted no sabe a dónde va ni a dónde lleva a España.

Señor Rodríguez Zapatero, lo siento mucho, pero hoy hemos visto que el problema es usted.

Es moralmente reprobable calificar de anticatalán, antidemócrata y contrario al Parlamento de Cataluña a quien simplemente mantiene criterios distintos de los que se han mantenido aquí.

frase -

Mariano Rajoy, líder del Partido Popular, ha declarado que "reformar el Estatuto para hacerlo compatible con la Constitución es como querer hacerle una permanente a un puercoespín". El Presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero había dicho que "la unidad del Estado no significa uniformidad" y que "la Constitución es la fuente de legitimidad del Estatuto".

tester -

Enhorabuena a Rajoy, claro, directo, profundo con argumentos en los ataques a ZP, este solo mari.conadas

perlero -

Gracias, Rajoy, por tu firmeza, por tu personalidad política y, porque gracias a ti, la Expaña agónica todavía puede respirar.

sufrido lector -

Volviendo a la defensa que el PP está haciendo de la Constitución Zapatero repitió el mismo argumento esgrimido durante todo el debate de que Alianza Popular no votó el Título VIII, y dijo que “han pasado de la frialdad a la intransigencia. La Constitución está muy bien custodiada por quienes creímos siempre en ella, no es precisa una cruzada contra nadie, porque la Constitución es democracia y tolerancia y nunca intransigencia”.

En cuanto al patriotismo, Zapatero lo definió como “querer a su país y defenderlo especialmente fuera de nuestras fronteras”. “Le tengo recordar lo que su copresidente (por Aznar) está diciendo por el mundo de España –balcanizacion, disgregación y que volvemos a las andadas- empiece por su presidente de honor y llámele al orden si es que se atreve, claro”.

Zapatero acusó a Rajoy de sembrar “insidias” desde que perdieron las elecciones, y dijo que sobre la tragedia del 11 de marzo, “hicieron cábalas y consideraciones únicamente para intentar lavar sus errores y sus engaños pero la verdad, el tiempo y la justicia les ha puesto en su lugar. Se equivocaron”. “Cuando el Estatuto se apruebe , esté en vigor y se desplieguen todos sus efectos le recordaré que se equivocaron y engañaron a los ciudadanos porque nada está en riesgo”.

Zapatero cerró el debate reiterando su reconocimiento a la “identidad nacional” de Cataluña y expresó que el proceso de reforma del Estatuto “culminará con éxito para ofrecer a próximas generaciones una Cataluña fuerte, con más autogobierno y con una identidad reconocida” con la mejor predisposición del gobierno”. Zapatero concluyó pidiendo al PP que “reconozcan la identidad nacional de Cataluña que es evidente y es bueno para todos”. (FIN)

sufrido lector -

Zapatero dijo que Rajoy “ha calificado como a un puerco espín al Estatuto aprobado por el parlamento de Cataluña, esa ha sido la aportación mas original, las otras que ha hecho al entendimientos a lo que es la soberanía, al trámite en el que estamos son de una profunda incultura inconstitucional, así de claro”. En un tono bastante molesto, Zapatero insistió en que “no hay reforma encubierta de la Constitución, esto es el abc de nuestro sistema constitucional, la reforma tiene su trámite y ninguna ley ni estatuto puede reformar la Constitución”. Según Zapatero “por eso no han venido con el recurso porque sabe que le van a quitar la razón y todo lo que han dicho hasta ahora es falso de toda falsedad”.

A continuación, señaló el segundo punto “falso de toda falsedad” porque Rajoy “ha pretendido poner encima de la mesa y es un tema muy serio que el Estatuto contiene un poder soberano”. Para Zapatero “la mejor prueba es que este Estatuto está aquí en la sede de la soberanía, se va a debatir aquí en la sede de la soberanía y se va a aprobar aquí en la sede de la soberanía”. Zapatero dijo que el Estatuto “no contiene nada que se parezca a la pretensión de soberanía ni autodeterminación y decir lo contrario es engañar, no respetar la verdad del texto”. (continua....

sufrido lector -

Zapatero contabiliza insultos y regaña a Rajoy

25 minutos después de la comparecencia de Rubalcaba llegó el turno de réplica del presidente del Gobierno. "La democracia se acompaña con cultura constitucional. Se expresa en el respeto democrático y en el respeto en esta Cámara porque representamos a todos. Señor Rajoy, el respeto es escuchar y no se atreven nunca a escuchar al portavoz socialista", en referencia a Rubalcaba.

Le pidió a Rajoy que tomara nota "de cómo le ha escuchado toda la cámara pese al poco respeto que ha tenido con la delegación catalana intentado enfrentarla al pueblo y a la ciudadanía catalana". Dicho esto, decidió con poca suerte –se repitió varias veces–hacer un relato de "insultos contra mí de las últimas semanas: frívolo en 20 ocasiones, incapaz y acomplejado 6 veces; no tener agallas en Ceuta y Melilla; falto de valor y cultivar el disimulo, grotesco, zafio, manipulador, sectario, maniobrero, taimado, fingimiento, veleidoso, antojadizo, que traicionaba a los muertos de ETA". Terminado el inventario preguntó: "¿Ve lo fácil que sería responder con la misma moneda? No hay nada más fácil, pero es lo más dañino, no lo voy a hacer y pido que todos que no lo hagan (que no insulten a Rajoy)". (continua....

sufrido lector -

El portavoz socialista dijo que “lo peor” es que “alimentan el enfrentamiento entre españoles y un anticatalanismo visceral que recorre de su mano los pueblos y ciudadanos de España” cuando afirman que los “pobres van a salir triturados, que los catalanes se lo quieren llegar todo. Eso es falso y peligroso”. “Han pasado de hablar catalán en la intimidad a despreciar la voluntad del pueblo de Cataluña”.

Para Rubalcaba el problema es que “Rajoy solo tiene una oportunidad, o gana las elecciones o se acabó” y quiere hacer “las cosas deprisa con poco tiempo y poco espacio” y por ello “desgasta al gobierno en temas de Estado, el territorial y el terrorismo, sin importarle el precio a pagar”.

También se refirió a al gobierno del PP del que dijo que “la legislatura pasada la emprendieron con Euskadi y ahora son la cuarta fuerza política en el País Vasco, esta legislatura con los catalanes y son la cuarta fuerza política en Cataluña”. “¿Cómo quieren garantizar la Constitución cuando es irrelevante en Euskadi y en Cataluña? No se habla con nadie, no se entiende con nadie, están enfrentados a todos y a todo”.

Finalmente el socialista pidió a Rajoy que “piense” y se sume a la mayoría de la Cámara sin hacer “ofertas trampa contra los partidos nacionalistas porque la solución es incluir a los nacionalismos. A ese consenso llamamos al PP”. (continua....

sufrido lector -

Como primer resumen particular, esgrimió su argumento favorito, el de las mentiras del PP: "No hay que engañar a los españoles y saben a qué conduce esto porque lo han sufrido en carne propia", en clara referencia a su famosa frase pronunciada en las jornadas del 11 de marzo.

Rubalcaba arremetió contra el PP del que dijo que realiza “un coro ensordecedor que hace muy difícil oír al grito ¡España se rompe!. Les acusó de decir que la reforma va a acabar con España cuando “han sido los últimos en llegar a la casa común de la Constitución y ahora nos quiere echar a todos”. “La Constitución”, continuó “es de todos, los que la votaron y los que no, es de todos y cabemos todos”. “Han llegado los últimos y todavía no la conocen, la quieren tanto que la quieren sólo para ustedes”, dijo. “La Constitución existe porque lo decidimos españoles yo la voté, no se si él –por Rajoy-, Aznar no”.

Rubalcaba mencionó la ausencia de Rajoy durante su intervención “no le gusta lo que digo, a mi tampoco lo que dice él, pero yo si me quedo”. “Podían haber hecho crítica dura y votar no, pero ha preferido hacer campaña con insultos y mentiras para desgastar al presidente, meter miedo con formulaciones radicales, extremistas, aterradoras. El Apocalipsis Now con patrañas con las que pasará lo mismo que pasó con las armas de destrucción masiva, nadie las va a encontrar nunca”, dijo Rubalcaba. (continua....

sufrido lector -

Recordó Rubalcaba que el PP pidió que el Plan Ibarretxe no fuera admitido a trámite porque "era dar alas al lehendakari. Nosotros dijimos que es aquí, en el Congreso, donde hay que discutir. Fue un buen debate que acabó en una votación". Después, describió lo que, a su juicio, ocurrió: "El ataque a la unidad de España se disolvió en unas horas de debate. La crispación desapareció aunque no los crispadores".

Para el portavoz socialista "el PP se ha opuesto al debate porque dice que es una reforma encubierta de la Constitución". Rubalcaba se preguntó: "¿Por qué no ha hecho lo mismo que hicieron en el Plan Ibarrexe los nacionalistas, por que no han ido en tiempo y forma al Tribunal Constitucional". La siguiente pregunta fue más bien una acusación: "¿Por qué han ido a pedir la suspensión del pleno, a la una", poco antes de que empezara.

Al hilo del recurso planteado, Rubalcaba añadió que en el PP "saben que su situación jurídicamente es insostenible, lo sabe un estudiante de primero de derecho. No puede reformar la Constitución un Estatuto". Todo se resume, en su opinión, al "intento de meter el miedo a los españoles". Y en este punto, auguró lo que dirá el Alto Tribunal: "Yo creo que les van a decir que han gastado millones de las antiguas pesetas en una campaña que es una patraña". (continua....

sufrido lector -

En su discurso, Rubalcaba volvió a esgrimir sus frases del 13 de marzo: "No hay que engañar a los españoles y ustedes saben a qué conduce esto porque lo han sufrido en carne propia". Pero su argumento principal fue el recurso ante el Constitucional: "Les van a decir que han gastado millones de las antiguas pesetas en una campaña que es una patraña". Rajoy no estuvo presente. Zapatero le regañó: "nunca se atreve a escucharle", a Rubalcaba. Zapatero cerró el debate reconociendo la "identidad nacional" de Cataluña e invitando al PP a que hiciera lo mismo porque "es evidente y bueno para todos".

Saludando al "presidente Pujol", el portavoz parlamentario del PSOE defendió la reforma del Estatuto catalán como "ajustada a la legalidad"

Refiriéndose a Mariano Rajoy –ausente en ese moemento– recordó que "ha comenzado y terminado preguntado por qué". Es sencillo –explicó el socialista– "pregúnteselo a Camps que es el primero que lo ha traido; o a Piqué, que participó tanto que voto la parte de competencias catalanas; o al señor Arenas que participa en el proceso de reforma estatutaria en Andalucía". (continua....

I. V. F. -

El debate quedaría incompleto sí no habláramos de Mariano Rajoy. El presidente del Partido Popular ha estado muy brillante en la forma y en el fondo demostrando que es un excelente parlamentario; pero quizá lo más interesante es que el líder popular se ha dedicado a transmitir en el Congreso, simplemente, el sentir de millones de personas que ven con espanto la incapacidad de Rodríguez Zapatero.

Por más que se empeñen Zapatero y sus amigos, aquí no hay crispación. Simplemente existe un sentir general: Zapatero está hundiendo el país. El presidente del Gobierno intenta aislar al Partido Popular, pero aislar a diez millones de ciudadanos es imposible. Al final, la realidad es que nos están secuestrando la democracia. (FIN)

I. V. F. -

En cuanto a los tres ponentes del Estatuto –Más, De Madre y Carod– no ha habido sorpresas. Constituyen el exponente del nacionalismo más rancio, del independentismo más radical, del odio a España más extremo, de la agresividad más zafia y de la hipocresía más extrema. Han llegado los tres al Congreso como los buenos de la película, pretendiendo que por treinta minutos de parlamentarismo simplista nos vamos a olvidar de la larga lista de ofensas, insultos, provocaciones y ataques de unos políticos que no entienden la crítica. Sólo saben de obediencia militar. No pueden pretender que todos sus chantajes pasen a ser historia. Sólo entienden de democracia dirigida.

Dos especimenes de la política que –aunque parezca mentira– siguen existiendo merecen capítulo propio. Me refiero a Durán i Lléida y a Puigcercós. Dos intervenciones sin desperdicio. La política es pura cloaca. ¿No se acuerdan cuando Durán i Lleida perdía la cabeza por ser ministro en el Gobierno de Aznar? Pues ahí lo tienen, alardeando de católico para arremeter contra la Iglesia y contra la COPE. Resulta que Durán i Lleida ha renunciado a todos sus principios religiosos para dar el sí al Estatuto. Duran ha dicho sí a un texto que deja la puerta abierta al aborto libre y a la eutanasia, dejando la enseñanza de la religión como algo marginal cuando no suprimida. Por su parte, respecto al independentista Puigcercós todo se resume en algo muy fácil: estamos ante el ejemplo más gráfico de como se aplica el totalitarismo a la política. (continua....

I. V. F. -

El debate parlamentario sobre el Estatuto de Cataluña celebrado este miércoles en el Congreso de los Diputados ha sido altamente clarificador. Ha dejado a cada uno en su sitio, es más, nadie se ha escapado de la triste realidad de una clase política que está demostrando una gran intransigencia hacia los que no piensan como ellos. Vamos por partes.

El presidente Zapatero ha pronunciado un discurso muy poco consistente. Ha manifestado su crítica hacia el Partido Popular, –única formación constitucional– y se ha mostrado encantado con todos los partidos políticos que apuestan por la ruptura de la Constitución. La confirmación de una realidad. Hasta ahora hemos dicho muchas veces que Zapatero gobernaba con los independentistas por necesidad, después de lo visto hemos de concluir que el presidente ha buscado los socios de Gobierno por pura convicción. Se había dicho que, en el debate del Estatuto, íbamos a ver al Zapatero más genuino. Es verdad, hemos visto al presidente más frívolo, más superficial y más irresponsable posible. Lleva meses dorando la píldora para terminar diciendo que su fórmula mágica a lo Harry Potter para sustituir la palabra nación es "identidad nacional". Menuda solución. (continua....