El PP se comerá el 'marrón' de los nombramientos a dedo por Rubalcaba (PSOE),en la Policía.
El Gobierno socialista lleva casi dos años sin cumplir una sentencia judicial que los populares deberán ahora afrontar.
Al legado económico que deja el PSOE al próximo Gobierno se suma la caótica situación en que se encuentra la Policía.
El PP -si se cumplen las encuestas- tendrá que gestionar un cuerpo que se encuentra patas arriba.
Por orden del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM), el nuevo Ejecutivo tendrá que sustituir a 7.000 mandos policiales que el actual Gobierno nombró a dedo.
Asimismo, deberá arreglar -también por mandato del mismo tribunal- la falta de criterio para diferenciar las funciones de un comisario con un comisario principal, máximo grado del cuerpo.
El desaguisado lo debería haber arreglado el actual Gobierno, que aprobó en enero de 2008 el catálogo de puestos de trabajo que permitía esta situación.
Sin embargo, los tiempos judiciales han provocado que el Ministerio del Interior haya prorrogado la situación hasta llegar a las elecciones generales.
La sustitución de 7.000 mandos elegidos a dedo por otros designados con criterios profesionales fue ordenada por el TSJ en diciembre de 2009 y ratificada por el Tribunal Supremo hace más de un año.
Desde entonces, Interior estudia el mejor modo de cumplir la sentencia, que aún no ha encontrado y para la que en principio no hay plazo previsto.
La cercanía de las elecciones hace prácticamente imposible que haya una solución previa a los comicios.
La polémica de los comisarios, por su parte, fue ratificada por el Supremo a mediados del pasado julio y comunicada a las partes en septiembre.
En este caso, el tribunal dio dos meses al Ministerio para cumplir la sentencia. Un tiempo muy ajustado teniendo en cuenta que coincidirá en plazo con la fecha de los comicios del próximo 20 de noviembre.
El TSJM emitió ambas sentencias tras las pertinentes denuncias del Sindicato Unificado de Policía (SUP), en el caso de los nombramientos a dedo, y del Sindicato Profesional de Policía (SPP), en el asunto de los comisarios.
Fuentes de ambas asociaciones profesionales aseguran que pedirán el cumplimientos de los fallos judiciales al futuro Gobierno con la misma fuerza con que se lo han exigido -sin éxito- al actual.
El Ministerio encabezado entonces por Alfredo Pérez Rubalcaba no sólo no ha cumplido las sentencias, sino que durante varios meses incluso las ignoró y siguió actuando como si no existieran.
De hecho, continuó emitiendo órdenes por las que nombraba altos mandos del nivel 28 de la escala funcionarial sin motivación, algo que prohibía explícitamente una de las sentencias.
El TSJM amenazó con deducir testimonio a los responsables de esta desobediencia y fue entonces cuando el Ministerio dejó de actuar en ese sentido.